Ser madre y ama de casa es un trabajo muy duro y poco valorado, sin embargo es importantísimo.
La frase “madre trabajadora” es redundante (Jane Sellman)
La sociedad no es más que el reflejo de todas las familias que la conforman.
Si lo que se busca es tener ciudadanos felices, sanos, productivos, sabios…. entonces alguien tiene que ‘crear un hogar’ en el cual esos nuevos seres humanos puedan vivir, crecer, formarse y desarrollarse.
Las madres son como pegamento. Incluso cuando no las ves, siguen sosteniendo a la familia (Susan Gale)
Diferencia entre apego y amor:
Ser madre ama de casa no es para cualquiera
Hace falta mucha vocación de servicio, paciencia, tolerancia, empatía y ganas de hacer felices a los demás para ser una buena «homemaker».
¿Cómo ser una Homemaker y no enfermar en el intento? Y si enfermas, ¿Cómo recuperarte y no volver a caer?
1 Valórate
Valora tu trabajo y verás como harás todo con más ganas.
2 Cuídate
Come sano, haz ejercicio, ten vida social, aprende cosas nuevas, ten proyectos personales, descansa, medita, conócete a ti misma busca ayuda para sanar heridas y para aprender a controlar tus emociones. Por ejemplo, la terapia cognitiva-conductual y el mindfulness te equiparán de herramientas para afrontar los desafíos de ser mamá.
Mindfulness para madres: https://vivirmindfulness.com/vivir/ejercicios-mindfulness-madres
Los videos de psicólogos y pediatras como Alberto Soler te pueden guiar en tu aprendizaje e inspirarte a mejorar.
3 Pon límites, busca la justicia, todos deben tener responsabilidades y ayudar en algo pero también tener tiempo de descanso y ocio, tú también.
Homogeneizar el descanso:
4 No dejes de tener vida propia
Conserva siempre un espacio para SER.
Los hijos crecerán y se irán independizando, con el tiempo se alejarán para tener una vida propia (lo cual es muy bueno y sano). Entonces tú te encontrarás con tiempo en tus manos y si no construiste una vida te sentirás vacía.
Que tu vida esté orientada solo y exclusivamente a tus hijos no es sano ni para ti ni para tus hijos.
Pregúntate: ¿Qué me gusta hacer? ¿Qué me gustaría estudiar? ¿Tengo alguna amiga en quien confiar y con quien pasarlo bien? ¿Me hago tiempo para estar con mi pareja? ¿Me siento realizada o me gustaría trabajar aunque sea en part-time?
De todos los derechos de una mujer, el más grande es ser una madre (Lin Yutang)
«El trabajo doméstico es socialmente invisible desde el momento en el que aquellas mujeres que se dedican a él son consideradas como inactivas en censos y en estadísticas.»
Crianza respetuosa:
Los sonidos más dulces dados a los mortales son los de la madre, del hogar y del cielo (William Goldsmith Brown)
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